Zapatillas de running y trail de la marca Joma: ¿Sí o no?
En esta entrada de blog doy mi opinión personal, quizá algo sesgada por mi experiencia (algo más de una década) en hacer kilómetros y gastar zapatillas, aun así voy a intentar ser lo más objetivo que pueda, aunque mi opinión no sea la más popular ni la más acertada. Como todo corredor con fervor por las competiciones populares he entrenado como un animal (y sigo haciéndolo aunque no compita) por lo que he realizado muchos kilómetros y he gastado muchos pares de zapatillas.
COMPRAR LAS ZAPATILLAS CUANDO ERES UN CÁNDIDO
Al principio y debido a la inexperiencia nos dejamos asesorar por los expertos en la materia o dejamos que los tenderos nos orienten o aconsejen sobre qué zapatillas nos viene mejor, otras veces creemos que más caro es sinónimo de mejor y soltamos la pasta sin miramientos; este tipo de cándido a los tenderos le encantan. Muchas veces compramos zapatillas sobrevaloradas con precios muy elevados que no te protegen más, ni son más confortables, y por supuesto, no mejoran más el rendimiento. Por esa época hemos pasados todos, es normal cuando empiezas en el mundillo.
TODAS LAS ZAPATILLAS DE RUNNING TIENEN UNA VIDA ÚTIL
Las zapatillas se desgastan, se deforman y se rompen. Pero hay modelos que son más resistentes, y no tienen por qué ser los más caros. Normalmente las zapatillas con más durabilidad son las llamadas tochas o tope de amortiguación, estas son las zapatillas que suelen pesar algo más y se suele utilizar para entrenos largos y más tranquilos. El peso del corredor, la pisada, el pie ancho o dedos en garra, el uso de plantillas... también influye en la duración de una zapatilla. En lo personal raro era que me durara más de 1000 kilómetros, se rompía antes las uniones del upper, y si duraba el upper( buena señal para saber la calidad de la zapatilla), perdían confort, y por lo tanto, forzaba más las articulaciones.
LAS ZAPATILLAS PERFECTAS DE RUNNING
No hay una zapatilla perfecta, lo que a ti te va bien a otro corredor no le va tan bien. Por eso hay tantas marcas y tantos modelos, para que probemos hasta dar con la tecla. Eso sí, no seas Cándido y no cometas el fallo de comprar siempre la misma marca, las hormas cambian y quizá la nueva versión del modelo utilizado ya no te vaya tan bien. Para mí una zapatilla perfecta debe de ser muy cómoda, duradera y razonable de precio (sobrepasar los 100€ es excesivo, cosas de cándidos)
MI EXPERIENCIA CON LAS ZAPATILLAS JOMA RUNNING
Todos conocemos la marca Joma pero muy pocos son los que prueban esta marca española. Y es que esta marca de zapatillas hace unos años tenía fama de no estar a la altura de sus competidoras y se consideraba media gama. Yo mismo la infravaloré y adquirí unas Joma de trail para mis salidas por la montaña para no estropear las otras zapatillas de alta gama (más de 100 pavos, sí, yo también fui un cándido) Mi grata sorpresa fue que aquellas Joma eran irrompibles y no muy diferentes a otras zapatillas de alta gama de trail.
LA REVOLUCIÓN DE JOMA RUNNING
En la actualidad las zapatillas de alta gama de Joma pueden competir de tú a tú con cualquier marca, quizá cojee aún en el modelo R3000 (placa de carbono) La siguiente edición seguro que lo mejoran y es un modelo a tener en cuenta. Yo aconsejo para entrenar la Storm Viper, la Supercross, o la recién mejorada Hispalis, canelita en rama para los pies. Para entrenar series rápidas y para competir aconsejo la R4000 ( las dos versiones) o la R5000, y muy pronto la R2000, una maravilla para correr rápido. Para trail aconsejo el modelo Sima, el modelo Rase o el modelo Sierra, o el Kubor, que también es tope de gama, aunque yo prefiero los dos primeros. Estamos hablando de que el precio máximo de cualquiera de ellas no llega a los 80€. Por ese precio lo único que puedes comprar, como mucho, son zapatillas de gama media, y ya rebajadas, para que los Cándidos crean que han adquirido zapatillones.
LA VACILADA MEJOR CON JOMA
Después de tantos años exprimiéndome al máximo no puedo remediar sacar mi vena competitiva. Para mí subir al podio con unas Joma vale el doble. No hay nada más gratificante que ir a una competición calzando unas Joma de "pobre" y desbancar del podio al cándido que lleva unas zapatillas de placa carbono de 200€, eso no tiene precio y se desmonta el negocio de las zapatillas que mejoran el rendimiento. Hace tiempo que dejé de ser cándido, por eso yo me quedo con Joma.
