Aunque su nombre es más propio de Alemania y su diseño se asemeja al calzado italiano, lo cierto es que las zapatillas Munich son un producto que se fabrica muy cerca de Barcelona, concretamente en la localidad de Sant Boi de Llobregat. La historia de esta prestigiosa y reputada marca vinculada al deporte y a la moda comienza en el año 1939, una vez finalizada la Guerra Civil española.

El proyecto empresarial comienza, como muchos otros, a partir de un pequeño negocio familiar repleto de ilusión y motivación. El abuelo Berneda, zapatero de profesión, junto al resto de la familia se vuelca en la fabricación de todo tipo de calzado. El esfuerzo y las muchas horas de trabajo invertidas pronto ven su recompensa, llegando a posicionarse entre algunos de los más destacados fabricantes de calzado de la época.

Después de una década de consolidación en el sector, la familia Berneda toma una decisión arriesgada pero que a la postre sería acertada: especializarse en calzado técnico deportivo. Es así como en el año 1953, los hermanos Berneda se adentran como fabricantes en el desconocido ámbito del atletismo. El éxito no se hizo esperar demasiado llevando a la empresa a lo más alto, hasta establecerse como pioneros en la producción de zapatillas deportivas en España.

MUNICH y su icónico logotipo de la 'X'

En el año 1964 se producen dos cambios decisivos. Por un lado, la sociedad anónima Berneda adopta como denominación comercial MUNICH. Por otro lado, la nueva marca incorpora el característico e icónico logotipo de la 'X' que irá serigrafiado en todos y cada uno de sus modelos de zapatillas. Y como muchas de las cosas que suceden en esta vida, el logo de la 'X' surgió fruto del azar, ya que la visibilidad de la costura que unía la parte delantera con la trasera de la zapatilla afeaba el calzado. Como solución al problema, añadieron dos bandas que darían lugar a la legendaria 'X' de las zapatillas Munich.

La irrupción del fútbol sala

Otro de los acontecimientos que supuso un gran impulso para la marca fue el furor por el fútbol sala durante la década de los años 80 en España. Una disciplina deportiva que comienza a practicarse en masa y en la cual los futbolistas españoles pronto empiezan a despuntar hasta llegar a convertirse en todo un referente a nivel internacional.

Los hermanos Berneda vieron en este deporte una oportunidad de negocio única que no dejaron escapar. Para ello, decidieron diseñar una zapatilla especializada para la práctica del fútbol sala. El modelo GOAL triunfó entre la gente que practicaba futbito consolidando a la firma deportiva MUNICH hasta lo más alto y convirtiéndola en un líder del mercado. A pesar del paso de los años, la zapatilla MUNICH GOAL es uno de los productos top ventas de la marca catalana.

MUNICH da el salto a la moda

Después de un arduo trabajo en I+D, unido a una fuerte demanda a nivel nacional e internacional del reeditado modelo GOAL, MUNICH decide crear nuevos diseños de zapatillas para seguir reforzando su presencia en el mundo de la moda, a través de su línea streetwear.

Cada nuevo modelo que se incorpora al catálogo lifestyle de la marca, está inspirado en alguna de las zapatillas estrella de la gama deportiva. Por ejemplo, el modelo ROC, proviene de las zapatillas de atletismo y cross: la sneaker ACROPOL, tiene influencias de los modelos de taekwondo. Además de esto, MUNICH siempre se ha preocupado por la innovación, incorporando a sus sneakers soluciones técnicas que les proporcionen mayor confort y durabilidad.

En la actualidad, MUNICH atesora más de 77 años de experiencia en el sector del calzado. La tercera generación de la familia Bernada sigue esforzándose y trabajando día a día para seguir haciendo crecer a una marca que continúa conservando sus raíces, al tiempo que se apoya en la tecnología para progresar y poder ofrecer a los consumidores un producto de calidad basado en las últimas tendencias de la moda.